La Asociación Empresaria Hotelera Gastronómica de Mar del Plata (AEHG) recibió “con mucha alegría” y agradeció al Concejo Deliberante la aprobación del Programa de Asistencia y Sostenimiento de la Actividad Hotelera y los Salones de Fiestas, que establece medidas tributarias excepcionales para esos dos sectores castigados por la pandemia.

“Es un gran alivio”, destacó el presidente de la AEHG, Jesús Osorno, en diálogo con el diario La Capital y recordó que la actividad tuvo “un 2020 totalmente parado por decreto y la temporada enero – febrero 2021 no fue buena”.

“Esto fue un hito, va a ayudar”, consideró Osorno sobre la medida que tiene un costo fiscal calculado en 60 millones de pesos, sin contar las exenciones de Obras Sanitarias. “Hago extensivo mi agradecimiento al poder ejecutivo y a todos los bloques del Concejo Deliberante que nos apoyaron”, añadió.

En este marco, el titular de la AEHG señaló que “hay más de 300 hoteles cerrados en la ciudad”. “No sé cuantos van a abrir, pero seguramente con esto van a poder hacerlo algunos más que de otra no podrían hacerlo, porque vienen arrastrando deudas complicadas”, sostuvo.

En la misma línea, comentó que actualmente “estamos en el 30% de la capacidad hotelera de Mar del Plata”. “Esperamos que abra la mayor cantidad posible de hoteles. Somos dadores de fuentes de trabajo, que no se reemplazan con una máquina y la mayoría de las empresas son Pymes familiares, que han puesto su capital y esperanza en la ciudad”, dijo.

Asimismo, reflexionó que, por la pandemia de coronavirus, “en la ciudad se notó mucho la falta de turismo y el efecto de derrame que este tiene”.

“Un turista que pasa la autovía 2 carga nafta, compra un alfajor, un chicle, ya empieza a consumir y a dejar dinero en la ciudad”, graficó.

Pensando en lo que viene, Osorno afirmó sentirse “esperanzado de que la temporada va a ser buena”. “No soy un epidemiólogo que puede saber como se va a comportar la variante Delta, pero con el ritmo de vacunación, y si no tenemos un rebrote del virus, creo que va a ser una muy buena temporada”, deseó.

Por su parte, Mariano Baccardi, propietario de un salón de fiestas ubicado en la avenida Constitución al 5900, sostuvo que esta medida representa “algo bueno” para el sector y agregó que la misma fue “una de las únicas o poquitas señales” que tuvieron en cuanto “a la asistencia de parte del estado y del municipio” en el contexto de pandemia.

“Después no hemos tenido ayuda ni eximición de nada, aparte de estar completamente inhabilitados para trabajar”, aseguró.