El Gobierno nacional reforzará la agenda de gestión, con eje en la reconversión de los planes sociales por empleo genuino y registrado, el avance en la negociación con el Fondo Monetario Internacional (FMI) y el combate a la inflación y a la inseguridad, así como la agenda federal y un plan quinquenal de viviendas que será anunciado próximamente.

En las próximas horas, el presidente Alberto Fernández dictará un decreto para transformar planes sociales en empleo, sin que el beneficiario pierda la asistencia del Estado, un marco normativo a las actas acuerdos ya firmadas con los segmentos rurales, de la construcción y gastronomía, y que están elaborando los ministros de Desarrollo Social, Juan Zabaleta; y de Trabajo, Claudio Moroni.

Así lo adelantó el propio mandatario, al clausurar el Coloquio de Idea que sesionó esta semana en Costa Salguero, con la participación de todo el empresariado argentino.

En ese marco, Fernández anunció que el Gobierno prepara un decreto marco para crear un sistema que permita a los beneficiarios de planes sociales pasar a emplearse en la actividad privada «sin perder ese derecho», una medida que consideró vital para el combate de la pobreza.

«Cambiar planes por empleo. Ese debe ser nuestro primer objetivo. De ese modo estaremos combatiendo frontalmente a la pobreza que hoy ha sumido a millones de familias argentinas», dijo en ese escenario.

«Estamos retomando la vida normal y el Presidente va tomando las medidas que tenía previstas cuando asumió», dijo un hombre cercano al Presidente quien, además, recordó que apenas asumió cumplió una de sus promesas de campaña, como fue la de medicamentos gratis para los jubilados.

Como otro tema de agenda, el mandatario también viene apuntando a los avances en la negociación del Gobierno con el Fondo Monetario Internacional (FMI).

En esa línea, el martes último, en un almuerzo con empresarios en Casa Rosada, Fernández hizo un «diagnóstico» de la negociación con el Fondo que «generó mucha tranquilidad» y los referentes invitados «se fueron con una visión distinta a la que tenían antes de llegar a la reunión», según confió un alto funcionario de Casa Rosada.

En aquel mismo almuerzo, Francisco de Narváez, ya alejado de la política, le propuso a Fernández acompañarlo junto a un grupo de empresarios a giras internacionales en busca de inversiones para el país.

En el Coloquio de Idea, el Presidente también habló de la negociación con el Fondo: «Debemos resolver el problema de la deuda haciendo que la misma sea sostenible, es decir, que no nos condene a la postergación de Argentina; debemos crecer, acumular reservas y empezar a cumplir», sentenció.

Ayer también, el Gobierno ratificó ante empresarios e inversores de compañías estadounidenses su voluntad de alcanzar un «acuerdo positivo» con el FMI, en una reunión donde se presentaron los principales lineamientos y perspectivas de la política y la economía argentina y se dialogó sobre los avances en la negociación con el organismo.

Así lo expusieron ante una veintena de inversores y empresarios el jefe de Gabinete, Juan Manzur; y el ministro de Economía, Martín Guzmán, en un encuentro realizado ayer al mediodía en la sede del Consulado argentino en la ciudad de Nueva York.

Por otro lado, el Presidente retomará la semana próxima las reuniones de Gabinete en las denominadas «Capitales Alternas»: esta vez será el turno de Comodoro Rivadavia, luego de haber visitado Río Grande (Tierra del Fuego), Chilecito (La Rioja) y Rosario (Santa Fe).

La iniciativa de las Capitales Alternas tiene como fin descentralizar la gestión y tener un intercambio directo con autoridades locales y organizaciones de la sociedad civil, y se enmarca en la propuesta de agenda federal que también fue un compromiso de campaña de Fernández

También en los próximos días, el Gobierno tiene previsto anunciar el Plan Quinquenal de viviendas para el período 2022-2026, un proyecto que ultima el ministro de Desarrollo Territorial y Hábitat, Jorge Ferraresi.

De cara a las elecciones legislativas del 14 de noviembre, el Presidente repetirá también con las recorridas por distintas localidades del conurbano bonaerense, sin exposición mediática y solo para hablar con vecinos y conocer sus problemáticas, como la que hizo el miércoles pasado en el partido de San Martín.

En la agenda también figuran como prioridades, que surgieron precisamente de esas interacciones cara a cara, el combate a la inflación en la relación de la suba de precios y la caída de salarios; y la presencialidad escolar en el caso de la vuelta a la normalidad tras la pandemia.

También la inseguridad figura a tope en las conversaciones que Fernández mantiene con los vecinos. En esa línea, esta semana el ministro de Seguridad, Aníbal Fernández, envió un primer contingente de Gendarmería a Rosario y anunció que esa fuerza, junto a Prefectura, comenzarán con patrullajes y controles en estaciones de la Línea Roca y Belgrano Sur, para prevenir robos y arrebatos.

«Es una decisión del Presidente seguir escuchando. Muestra tenacidad, es consecuente y está cómodo en esos encuentros», señaló una fuente oficial y agregó: «Escucha en los cara a cara a todos los sectores sociales, desde los de un barrio popular hasta los empresarios, desde jubilados a maleteros de Aeroparque, desde vecinos de clase media a trabajadores de la economía popular».

Por último, para ordenar la comunicación pública, el Presidente designó esta semana a la periodista y exdiputada nacional Gabriela Cerruti como portavoz de la Presidencia, para tener una correspondencia con los medios «clara, precisa y transparente», y para «combatir los rumores y las noticias falsas que tanto daño hacen a una comunicación democrática», según explicó el propio mandatario.