Corea del Norte disparó tres misiles balísticos, informaron fuentes militares surcoreanas, dos días después de la asunción del nuevo presidente, Yoon Suk-yeol, con una posición frente a Pyongyang más hostil que la de su predecesor.

«Nuestros militares detectaron hacia las 18.29 locales tres misiles balísticos de corto alcance lanzados desde la zona de Sunan, en Pyongyang», dijo el jefe del Estado Mayor conjunto de Corea del Sur y agregó que los misiles estaban orientados hacia el mar de Japón, informó la agencia de noticias AFP.

El Ministerio de Defensa de Japón también confirmó el lanzamiento y los servicios de vigilancia de las costas dijeron que emitieron una advertencia a los barcos.

Desde el inicio del año, Corea del Norte ha aumentado considerablemente sus pruebas y lanzamientos armamentísticos, llegando con este último al 16° test armamentístico.

El presidente de Estados Unidos, Joe Biden, tiene previsto visitar este mes Japón y Corea del Sur, con la situación en Corea del Norte como uno de los temas centrales a abordar en su visita.

El país asiático se autoimpuso una moratoria en los ensayos de armas nucleares y de largo alcance en medio de un acercamiento diplomático entre Kim y el entonces presidente estadounidense, Donald Trump, que colapsó en 2019 y está paralizado desde entonces.

Pyongyang realizó seis ensayos de armas nucleares desde 2006. El último y más potente fue en 2017 con una bomba de hidrógeno de 250 kilotones.

Pero la vecina Corea del Sur tiene una mayor capacidad de armamento convencional y Yoon solicitó que se desplieguen más medios militares estadounidenses. Además, en 2021, Seúl probó misiles supersónicos, lanzados desde un submarino.

Hasta ahora, las negociaciones para convencer a Kim Jong Un de que abandone las armas nucleares han sido infructuosas.

Durante cinco años, el presidente surcoreano Moon Jae-in llevó a cabo una política de diálogo con Pyongyang, pero según su sucesor, este enfoque «servil» fue un claro fracaso.

Algunos analistas sostienen que Kim Jong-un puede estar señalando con esta serie de pruebas que no está abierto al diálogo con el nuevo Gobierno.