Con un asueto administrativo para los organismos públicos y los bancos la ciudad de Balcarce celebró su 146° aniversario desde su creación. San José de Balcarce fue fundada el 22 de junio de 1876, y declarada ciudad el 15 de septiembre de 1949. Sus poblaciones rurales son: Pinos, San Agustín, Napaleofú, Ramos Otero y Bosch. Estos son pequeños poblados establecidos al margen de antiguas estaciones de trenes, que tuvieron importantes actividades económicas tiempo atrás.

La ciudad conserva estrecha relación con Mar del Plata desde sus inicios entre “costeros” y “serranos” que pretendían que el epicentro de esta gran región fuera de un lado o del otro. Finalmente, no se pusieron de acuerdo y cada grupo pudo constituir su poblado donde originalmente se lo propusieron.

El escritor e historiador, Amaury Rodríguez, comentó que “sobre la fundación de esta ciudad han existido divergencias, atribuyendo el escritor Rafael Cabot una actuación preponderante a José de la Cuadra, mientras que los conservadores reivindicaban la labor de José Andrés Chávez”.

Rodríguez opinó que la parte de la historia de Balcarce más “dinámica y apasionante” se centra fundamentalmente en el período 1930-1943 y por ello escribió un libro. En él hizo un análisis del Partido Conservador y de su figura política, Hortensio Miguens “el gran caudillo de Balcarce”, quien fue intendente en el año 1936-1940 y senador provincial a partir de 1943, entre otros cargos.

“En esta época sucedieron distintos hechos que aún dan que hablar en la ciudad. Por ejemplo, el 6 de septiembre del año 1936, se inauguró el monumento al Tte. Gral. José Félix Uriburu, sobre un proyecto presentado por Hortensio Miguens. Recuérdese que Uriburu fue el primero en realizar un golpe de estado a un gobierno constitucional”, recordó.

En tanto, apuntó que los políticos conservadores del ´30 decididamente sostenían que “el sufragio no era la razón última de la sociedad, existiendo otros derechos prioritarios. Pensaban que el gobernante que satisface las necesidades de su pueblo, no tiene porque buscar su legitimación en resultados electorales”.

Rodríguez hizo esa mención sobre el fraude electoral que se ejercía en la ciudad como un hecho “patriótico” que reivindicaba una metodología para ascender y permanecer en el gobierno.

Sin embargo, esa década también fue de un gran crecimiento edilicio. “Hubo una gran inversión en la obra pública relacionada con la política asistencialista llevada a cabo por el gobernador Manuel Fresco. Muchas obras que aún posee Balcarce fueron realizadas por el impulso de Hortensio Miguens y encausadas bajo el ingenioso arquitecto Francisco Salamone”, argumentó.

Por ejemplo, la ciudad conserva el matadero “Modelo”, el frente del cementerio; la escuela “Normal”; la remodelación de la plaza “Libertad”; y la construcción de la denominada “torta” y el monumento a la República que tuvieron trascendencia internacional. “La misma fue destruida por revanchas políticas cuando adviene la revolución del año 1943 y los conservadores se deben ir del poder”, recordó Rodríguez.

Sin embargo, también la época marcó un gran éxodo: “Desde sus comienzos Balcarce se perfilaba a ser una ciudad muy atractiva en la provincia de Buenos Aires. Pero el sistema gubernamental local era poco democrático y existían importantes persecuciones políticas. Entonces muchos balcarceños se dirigieron a la vecina ciudad de Mar del Plata para recomenzar sus vidas”, concluyó.