

Una pena de prisión perpetua recayó sobre Gustavo Adrián González, acusado de matar a sus padres a machetazos en La Plata. Las víctimas fueron su madre Nélida Beatriz Lataza (74), quien murió en el acto, y Manuel González Vázquez (76), quien falleció a los cinco días en un hospital.
Durante el juicio la fiscal Helena de la Cruz logró acreditar el nexo causal entre el ataque y el resultado fatal del hecho ya que la mujer falleció porque se asfixió por aspiración (estaba comiendo un bizcochito cuando el hijo la atacó) y el padre tuvo una sobrevida de cinco días después del ataque y murió por una de infección (sepsis) general por peritonitis.
Los jueces del Tribunal Oral Criminal III de La Plata, tras una detallada argumentación, encuadraron el hecho como “homicidio calificado por el vínculo en dos hechos, tenencia ilegal de arma de guerra y tenencia ilegal de armas de uso civil, hechos que concurren en forma real entre sí”, según se desprende de la resolución oficial.
Tras el feroz ataque el padre del ahora condenado vivió unos pocos días y llegó a prestar declaración que se incorporó al juicio por lectura, donde explicó cómo fue la mecánica del hecho y sindicó a su hijo como autor.


Este hombre falleció 5 días después del hecho por una infección que le produjo una peritonitis, pero todos los médicos -incluyendo la médica de Asesoría Pericial y el médico autopsiante- dijeron que era una complicación propia del tipo de intervenciones a las que tuvo que ser sometido por el ataque a machetazos, sumado a su edad -78 años- y al stress traumático, postraumático y quirúrgico.
El hecho ocurrió a fines de marzo del año 2018 en una vivienda de avenida 137, entre 80 bis y 81, y fue descubierto cuando el padre buscó auxilio con agentes que se encontraban en la zona. Al ingresar al inmueble, los policías se encontraron con el cuerpo de la mujer, que presentaba lesiones por cortes en el cuero cabelludo, además de varios hematomas en el rostro.
En tanto, su marido estaba herido con cortes profundos en el cráneo y el antebrazo izquierdo, por lo que fue trasladado de urgencia al hospital de Melchor Romero e intervenido quirúrgicamente, pero falleció.
La sentencia fue dictada por los jueces Ernesto Domenech, Andrés Vitali y Santiago Paolini.