Autoridades de Turismo de las provincias destacaron «el crecimiento sostenido» de la actividad que se evidenció durante las vacaciones de invierno al señalar que dejaron un balance que va de «muy bueno» a «excelente» en distintas localidades.

Además, en diálogo con las corresponsalías de la agencia Télam, los funcionarios remarcaron el impacto económico que generó el movimiento turístico en las últimas tres semanas en la actividad porque «dinamiza a las economías regionales» y cumplen un rol «fundamental» por el efecto «multiplicador en la economía y el empleo».

En ese marco, la subsecretaria de Turismo bonaerense, Soledad Martínez, destacó que en la provincia hubo «mucha ocupación, sobre todo en zonas de la sierra y destinos más alternativos a la playa como Tandil o Epecuén con más del 80%» y comentó que esto «ya no es una reactivación, sino que es sostenido y se mantuvo durante todos los fines de semana largos, tras la exitosa temporada de verano».

Según el Ministerio de Producción, Ciencia e Innovación tecnológica bonaerense, 2.553.246 de visitantes eligieron destinos de la provincia, lo que convirtió a esta temporada como «una de las mejores vacaciones invernales de los últimos 6 años».

La funcionaria también destacó los «destinos de cercanía que llamamos de escapada, como Luján, que tuvo las mejores vacaciones de los últimos 25 años, según dicen los prestadores» y apuntó que «turismo rural y de naturaleza son consumos que se afincaron en la pandemia y se han instalado, porque hay mucho de esto sostenido» durante las vacaciones de invierno.

Esas regiones «tienen turismo en la semana, de gente que llega, se instala a trabajar en la semana y trabaja desde una cabaña, y eso deja un impacto económico», añadió en diálogo con radio Provincia.

Las localidades de la Comarca de Sierras de la Ventana, en el suroeste bonaerense, completaron «los 15 días de vacaciones en la provincia en un 72% de ocupación promedio», señaló el subsecretario de Turismo de Tornquist, Gustavo Sandoval, y afirmó que «el balance termina siendo positivo, todas las actividades recreativas trabajaron».

Sandoval señaló que en estas vacaciones «el consumo estuvo más medido comparado con otros fines de semana largo y otras vacaciones de invierno de años anteriores».

La localidad de Carhué, reconocida por las propiedades de sus aguas hipermarinas, registró una ocupación del 85% en sus 1.500 plazas, dijo el director de Turismo, Pablo Ledesma, y apuntó que estas vacaciones «fueron muy buenas, por momentos con ocupación plena» y apuntó que dejaba «un balance excelente, tuvimos muchos visitantes de la región que llegan sobre todo a conocer las ruinas de Epecuén, que nos genera un impacto económico en servicios, restaurantes y el parque termal con buenos niveles de ocupación».

En la zona de playas, el partido de La Costa recibió 215.000 visitantes, un 27 por ciento más que el año pasado, y según el subsecretario de Turismo Cristian Escudero, «en julio unas 295.000 personas arribaron al distrito» que preparó una variada «agenda de actividades ratificando el buen posicionamiento del distrito a nivel turístico».

En Mar Chiquita, donde más de 7 mil personas pasaron sus vacaciones, el secretario de Turismo y Cultura, Germán Montes, destacó que «en dos semanas vimos la felicidad de las familias que encontraron en la programación municipal su espacio de diversión» que se vio reflejado también en «el consumo y el movimiento del sistema económico en gastronomía, alquileres, hotelería, artículos regionales e indumentaria».

En Córdoba, la temporada invernal tuvo un incremento del 20% con respecto al 2021 y, según la Agencia Córdoba Turismo, generó un movimiento económico de 21.100 millones de pesos, mientras la ciudad de Villa Carlos Paz tuvo «la mejor temporada de los últimos 15 años con ocupación promedio de 90%».

El presidente de la ACT, Esteban Avilés, destacó que «Córdoba sigue creciendo como destino turístico. Estas vacaciones de invierno fueron superiores a los números pre pandemia y eso nos llena de orgullo, por el trabajo que venimos realizando».

El funcionario detalló que Córdoba fue visitada por medio millón de turistas, en las tres semanas que va del 11 al 29 de julio, con un gasto promedio por persona de 10.000 pesos por día entre alojamiento, comida, recreación, transporte y compras.

En Santa Fe, el secretario de Turismo, Alejandro Grandinetti, señaló que «el arribo de turistas a la provincia ratifica el muy buen momento que está teniendo» ya que «se ha logrado instalar en la oferta turística nacional» al distrito.

«Hemos generado expectativas en muchos visitantes a través de diferentes promociones y programas y detrás de estos números y performance, comienzan a avizorar proyectos e inversión del sector privado en diferentes rubros como hotelería y entretenimientos «, concluyó Grandinetti.

La ciudad de Rosario, en tanto, alcanzó picos del 90% de ocupación de las casi 10 mil plazas, según un relevamiento del Ente Turístico Rosario (Etur) por lo que el secretario de Deporte y Turismo local, Adrián Ghiglione, se mostró «muy contento con la temporada de invierno» ya que «fueron miles los turistas que las pudieron disfrutar».

Mendoza recibió, durante las tres semanas del receso invernal, a unos 350.000 turistas con un promedio de estadía de 4,5 días y un gasto per cápita promedio de 7.000 pesos, según los datos del Observatorio Turístico gubernamental que indicó que la ocupación promedio fue del 95%.

«Presenciamos el gran movimiento turístico en toda la provincia», dijo la ministra de Turismo, Nora Vicario, y resaltó que «Mendoza ha alcanzado un nivel sostenido de visitantes desde el verano y seguimos trabajando, de la mano del sector privado, para fortalecer el desarrollo turístico, con más conectividad, mayores propuestas y mejores servicios durante todo el año».

Vicario remarcó «la recuperación de todas las rutas aéreas internacionales y nacionales, la buena conectividad terrestre con cualquier sitio de la Argentina» y «el trabajo del sector privado con quienes entendemos al turismo y la cultura como una actividad productiva fundamental con impactos multiplicadores en la economía, en el empleo y la calidad de vida».

Entre Ríos fue visitada por más de 650.000 personas que generaron un movimiento económico de 4.000 millones de pesos, un 30% más que en el receso invernal anterior y el gobernador Gustavo Bordet dijo que «las vacaciones dinamizan las economías regionales y mantienen el repunte muy claro y marcado del sector turístico».

Juan José Bahillo, quien aún era ministro de Producción, Turismo y Desarrollo Económico cuando se lo entrevistó, dijo que Entre Ríos «tiene todo para disfrutar de unos días de descanso en familia, con amigos o en pareja» y «múltiples actividades termales, deportivas, de pesca y en la naturaleza; buena gastronomía y turismo histórico y cultural».

En Corrientes, el Ministerio de Turismo informó que durante el receso invernal se generó un ingreso cercano a los mil millones de pesos y más de 150 mil turistas arribaron a la provincia, donde el ecoturismo fue una de las opciones más elegidas por los viajeros, así como el turismo religioso en Itatí.

El Observatorio Turístico indicó que el receso invernal 2022 arrojó cifras récords en el movimiento económico en la provincia, que rondó los mil millones de pesos, con un gasto promedio diario por turista de 6.500 pesos y una estadía de tres noches.

En Chubut, el director de Turismo de Puerto Madryn, Marcos Grosso, aseguró que «las últimas vacaciones de invierno fueron las mejores de los últimos 10 años, con un nivel de ocupación de camas que superó el 81%» sobre un total de 7.000 plazas.

El funcionario municipal estimó que «la actividad volcó durante las tres semanas, incluyendo la suma de las vacaciones locales con las de otros distritos, una suma superior a los 550 millones de pesos» en Puerto Madryn ciudad cabecera de la Península Valdés, el principal atractivo turístico en Chubut que se encuentra en plena temporada de ballenas.

Desde Tierra del Fuego, el presidente del Instituto Fueguino de Turismo (Infuetur) Dante Querciali, destacó que solo en julio llegaron al destino 32 mil visitantes, lo que se tradujo en un promedio de ocupación hotelera del 85% en Ushuaia (sobre 8.000 camas) y en un «gran impacto económico».

«Seguimos siendo uno de los destinos más elegidos por los viajeros a la hora de vacacionar en el país. Visitantes que conocieron nuestro destino el año pasado nos volvieron a elegir, volvieron a elegir nuestros servicios y esto se notó en los centros de montaña, en los comercios, alojamientos y sector gastronómico», aseveró.

En Río Negro, el secretario de Turismo de Bariloche, Gastón Burlon, dijo que el balance «la verdad es positivo, el 95 % promedio de ocupación en las vacaciones de invierno, más de 30 vuelos diarios, mucha gente de Brasil, mucha gente de Paraguay, Uruguay, de Chile» y destacó que continúan «con muy buena ocupación durante todo agosto» en esa localidad.

En la ciudad rionegrina de El Bolsón, el secretario de Turismo, Bruno Helrriegel, dijo que «el balance es súper positivo, hay un crecimiento y un mejor posicionamiento de destino respecto a años anteriores».

«En 2021 veníamos saliendo de la pandemia y nos encontramos con el problema de falta de nieve y este año a pesar de las adversidades económicas, de un contexto complejo a nivel socioeconómico, con mucha nieve se llevó una temporada en la cual se logra un incremento en la afluencia de turismo», detalló el funcionario y apuntó que «desde la Secretaría de Turismo vamos a apostar a este crecimiento que es paulatino pero que es firme».

En Jujuy, el ministro de Cultura y Turismo, Federico Posadas, valoró que julio fue «intenso y con una ocupación histórica en términos turísticos» que permitió lograr un 92% de ocupación hotelera (un 28% más que en 2021) y un impacto económico superior a los 3 mil millones de pesos.

Posadas afirmó que el 2022 «va a ser un año récord» en el arribo de turistas a la provincia y estimó que «a fines de agosto llegar al millón de visitantes y superar el millón y medio hacia fin de año».

En Neuquén, el Ministerio de Turismo indicó que en julio hubo ingresos por más de 7.500 millones de pesos, que se ajustan a los 433.206 pernoctes contabilizados en los establecimientos habilitados y el ministro Sandro Badilla calificó a las vacaciones de invierno neuquinas como «un éxito».

«Tenemos nuevos turistas en la provincia y turistas que ya nos han visitado que nos siguen eligiendo, visitando y disfrutando otros destinos» al punto que «uno de cada dos visitantes va a los destinos consolidados, vuelve, y casi la misma proporción, se deja sorprender por la oferta turística de la provincia, visitando un nuevo lugar», acotó.

Tucumán, en tanto, fue visitada por más de 173.000 turistas en vacaciones de invierno, lo que generó un impacto económico de 1.400 millones de pesos, y un aumento de la ocupación hotelera (77%) de sus 12.000 plazas disponibles del orden del 25% respecto de 2021, informó el Ente Tucumán Turismo.

«Fue una temporada récord y el beneficiario es el turista que nos visita, pero también lo es el tucumano que trabaja, que produce y que sustenta su día a día a través del flujo de visitantes», destacó el presidente del Ente y del Consejo Federal de Turismo (CFT), Sebastián Giobellina y remarcó que «el turismo es trabajo, generador de empleo y motor que dinamiza la economía, por tanto, cuanto mayor turismo, mayor es el crecimiento para Tucumán».

En Misiones, el turismo dejó más de 2.600 millones de pesos durante las vacaciones de invierno, cuando llegaron a la provincia unos 200.000 visitantes, un 16% más que en el mismo período de 2019 antes de la pandemia, según el Ministerio de Turismo de la provincia.