El presidente Alberto Fernández dijo este domingo que «ha habido una renta inesperada» producto de la coyuntura, que no era planificada ni responde a una inversión específica, y por lo tanto «esa mayor ganancia tiene que tributar al Estado».

El mandatario consideró además que los trabajadores no pueden hacer un esfuerzo extra puesto que «vienen de perder 20 puntos del salario en época de (el expresidente Mauricio) Macri», en declaraciones a FM Futuröck.

Fernández negó falta de diálogo con la vicepresidenta Cristina Fernández de Kirchner, al señalar que cuando necesita hablar la llama. Por otro lado, dijo que tiene «mucha confianza» en la gestión del ministro de Economía, Sergio Massa.

Además valoró la herramienta de las PASO y dijo que no está en sus manos «levantar o seguir» con esa instancia electoral ya que «es un tema del Congreso», al tiempo que definió las primarias abiertas, simultáneas y obligatorias como un «hallazgo» de la gestión de la exmandataria Cristina Fernández.

«Es un tema del Congreso, los temas electorales le corresponden al Congreso», y añadió que «la reforma de temas electorales necesita una mayoría calificada; no pierdan tiempo hablando conmigo».

Sobre el pròximo y cercano proceso electoral consideró que tiene la «decisión» de que el Frente de Todos (FdT) «gane las elecciones de 2023» y afirmó que «después discutiremos quién es el mejor candidato». En ese sentido, el jefe de Estado aclaró que «la mejor forma es con la gente votando» y enfatizó: «No soy obstáculo de nada».

En el plano de política internacional aseveró que se debe «darle institucionalidad a la Celac» (Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños) mediante un «marco normativo» que «permita que la región funcione como funciona la Unión Europea». Es «aspiracionalmente correcto» que se busque construir algo así, teniendo en cuenta que «cuando en Europa hay problemas, Europa va en socorro (del país afectado) y no lo deja solo», durante la entrevista.

También expuso que «la globalización entró en debate» con la coyuntura actual, consideró que «avanzamos muchísimo» en integración con la reciente reunión Unión Europea-Celac y dijo que América Latina tiene una «gran oportunidad como región», al recordar que uno de los temas del G20 es seguridad alimentaria».

A la hora de hablar de la política doméstica advirtió que «garantizar que la derecha no vuelva a Argentina, fundamentalmente por el bienestar del pueblo, es un deber que tenemos todos en nuestro espacio», y remarcó que el Frente de Todos (FdT) «no es de 3 o 4 dirigentes».

«Perón enseñó que cuando un compañero habla mal de otro compañero, empieza a dejar de ser peronista», dijo Fernández y añadió: «Nadie ha hecho más por la unidad que yo».

En otro orden sostuvo que Argentina «puede ser muy buena productora de alimentos» en el escenario internacional y abogó para que el Congreso «se ponga de acuerdo en avanzar con la ley de Agroindustria».

«Tenemos que entender el desafío que tenemos como región, la FAO está anunciando que en el mundo va a haber más de 300 millones de personas hambrientas, que están casi todas en el hemisferio sur», expuso el mandatario en declaraciones radiales.